
La stevia (Stevia rebaudiana Bertoni) es una planta originaria de China muy usada en la medicina oriental. Es una planta herbácea cuyas hojas poseen un alto poder edulcorante. La stevia contiene un poco de sacarosa pero su poder edulcorante se lo debe a su alta cantidad de glucósidos como esteviósidos, rebaudiósidos, dulcósidos, anetol… todos ellos con un poder edulcorante muy superior a la sacarosa (entre 10 y 240 veces mayor poder edulcorante que la sacarosa). Además su aporte calórico es muy bajo, siendo sólo de 0,2Kcal/g mientras que el azúcar aporta 4Kcal/g.
La stevia aporta gran cantidad de minerales como potasio, calcio y magnesio. También es importante el aporte de vitaminas antioxidantes como la vitamina C y otros antioxidantes como la rutina. El consumo de stevia procedente de cultivo biológico es recomendable al evitar así el consumo de contaminantes y de OMG. Los preparados de stevia que encontramos en el mercado como polvos, líquidos y comprimidos no pueden llevar el sello europeo que indica calidad ecológica ya que, para elaborarlos, se necesitan ingredientes excipientes que no son orgánicos o procesos de elaboración que no cumplen la normativa. En estos casos, es importante leer el etiquetado del fabricante ya que, si la stevia procede de cultivo ecológico, lo pondrá en la lista de ingredientes.
Formas de uso de la Stevia
- Hojas secas: estas hojas se infusionan y esa agua infusionada se usa como edulcorante. También pueden mezclarse con otras plantas para hacer infusiones.
- Polvo, líquido o comprimidos: existen muchas presentaciones en el mercado. El polvo y los líquidos concentrados suelen tener un mayor poder edulcorante que los comprimidos pero depende mucho del fabricante. Es importante mirar el etiquetaje donde nos dirá el porcentaje (%) de glucósidos de stevia que contiene el preparado. A mayor porcentaje de glucósidos, mayor será el dulzor que aporte y menor cantidad tendremos que usar. Hay preparados en el mercado donde se mezclan glucósidos de stevia con otros edulcorantes volviendo a ser importante leer bien el etiquetado. El polvo suele venir muy bien para hacer repostería y los comprimidos llevan menos cantidad de glucósidos para equiparar el dulzor de un comprimido al de una cucharadita de azúcar. Su uso en repostería es muy fácil al no estropearse al aplicar las temperaturas normales usadas en repostería.
Beneficios de la stevia
- La stevia no produce caries.
- Obesidad: la stevia es un edulcorante libre de calorías por lo que es muy recomendable como sustitutivo del azúcar en dietas de adelgazamiento al reducir la ingesta calórica. Además, como ayuda a mantener estables los niveles de glucosa en sangre, disminuye la ansiedad por comer que producen otros tipos de hidratos de carbono simples que hacen picos de glucemia colaborando también a la saciedad.
- Diabetes: la stevia tiene poder hipoglucemiante siendo un edulcorante muy apropiado en diabéticos de tipo II. Por este motivo no es sólo un edulcorante alternativo en la diabetes sino que ayuda a controlar la enfermedad recomendándose el consumo de una infusión de 1 cucharadita de stevia 3 veces al día.
- Hipertensión: el aporte de minerales como el potasio favorece la eliminación de líquidos regulando los niveles de tensión arterial. El contenido en antioxidantes mantiene la elasticidad de los vasos sanguíneos favoreciendo el buen funcionamiento de los mismos y unos buenos niveles de tensión arterial. Para este fin se recomienda tomar una infusión de 1 cucharadita de stevia 3 veces al día.
- La stevia no altera la flora intestinal como otros edulcorantes artificiales (sacarina, aspartamo y sucralosa) según indica un estudio recientemente publicado. Según este estudio, la sacarina, el aspartamo y la sucralosa consumidos habitualmente, alteran la flora intestinal. Esta alteración interviene negativamente en la regulación de los niveles de glucemia. El estudio concluye que el consumo a largo plazo de estos 3 edulcorantes favorece el desarrollo de enfermedades como diabetes u obesidad. La stevia y otros edulcorantes presentes en la naturaleza como el sorbitol o el xilitol (azúcar de abedul) no producen estos efectos negativos.
- Mala digestión: la stevia tiene propiedades coleréticas, es decir, favorece la producción de jugos biliares y, además favorece la producción de jugos gástricos favoreciendo y mejorando la digestión. Para estos casos se recomienda el consumo de trocitos de hojas frescas en ensaladas…
- Estreñimiento: la stevia aporta fibra, ácidos orgánicos (ácido cítrico o málico) y minerales como el calcio o el magnesio que tienen propiedades laxantes.
- Infecciones intestinales: la stevia contiene sustancias antimicrobianas que mejoran problemas infecciosos intestinales que cursan con diarrea, dolor de barriga…
- Afecciones de la piel y cabello: el agua infusionada de sus hojas secas puede usarse de forma tópica para mejorar problemas como caspa, seborrea, acné, eczemas, manchas… principalmente por sus efectos bactericidas, fungicidas y antiinflamatorios. También se usa en cremas y cosméticos.
Advertencias y contraindicaciones de la Stevia
- No se recomienda el uso de stevia en personas hipotensas
- No se recomienda su consumo en embarazo y lactancia sin consultar antes al médico al no haber estudios sobre su consumo en estas etapas de la vida de la mujer.
- Las hojas frescas o secas se deben consumir con precaución en personas alérgicas al polen y plantas como la ambrosía o crisantemos por posibles reacciones cruzadas.